Cada canción tiene su momento y es apropiada para según qué ocasiones. Hay algunas que nos hacen rememorar determinados ambientes o personajes. Por ejemplo, Billy Joel con su Piano Man nos hace pensar en un bar nocturno, donde van los solitarios en busca de un compañero con quien pasar la noche, como diría Joaquín Sabina “cuando el alma necesita un cuerpo que acariciar”. Estas canciones recrean con su música ambientes de humo y licor, de manos ensortijadas, espaldas de gabardinas y carmín en los labios.
Un lugar así me viene a la mente cuando escucho los temas de Elliot Murphy o Chris Smither. Esta es, a mi modo de ver, la auténtica música de bar nocturno: guitarras, armónicas, letras interminables, coros femeninos y al frente del conjunto musical un hombre al estilo de Jeff Bridges en Crazy Heart.
Aquí dejo un vídeo de un directo de Elliot Murphy:
Yo me imagino esos ambientes cuando escucho esta canción jeje:
ResponderEliminarhttp://www.youtube.com/watch?v=qcHyEaKidks
¡qué chula! Sí,sí es verdad que también recuerda a un sitio así :)
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