Jack Vettriano es un pintor escocés nacido en 1951.
Por lo que he leído en Wikipedia empezó a pintar a los 21 años cuando su novia le regala unas acuarelas por su cumpleaños. No es de extrañar que esta inclinación por el arte no surgiera antes si tenemos en cuenta que su familia no era precisamente rica y que él se vio obligado trabajar duro desde muy joven.
Nadie llena lienzos sin haber llenado antes la panza, no?
En sus cuadros suele representar escenas íntimas, provocando en el espectador una sensación de
voyeurismo artístico, a veces inquietante y, porqué no decirlo, también morboso.
Los protagonistas de sus obras son personas de la alta sociedad, a juzgar por su apariencia y por los ambientes que los envuelven. Y dadas las vestimentas y peinados se podrían identificar temporalmente con los años cincuenta.
Quizá por eso a mí personalmente sus cuadros me recuerdan un poco a la serie norteamericana Mad Men.
Pero en la obra de Vettriano también hay lugar para el romanticismo y la soledad. Todo ello reflejado con colores intensos, formas muy definidas y un brillante juego de luces y sombras.
Y para terminar, por contar algún detalle escabroso de su vida, aunque en realidad poco relevante, según se recoge en Wikipedia en enero de 2012 fue detenido por conducción temeraria y posesión de drogas.
Finalmente, y por no dejar un pésimo sabor de boca a tenor de este último comentario, prefiero poner el punto y final a esta entrada con la que es hasta el momento una de las obras que más me gustan de este artista.
